¿Por qué el té?
El mundo del té
¿Por qué el té?
TÉ, SALUD Y BIENESTAR
El té está de moda en todo el mundo por
sus aportaciones saludables. En este sentido, cada vez son más los
estudios sobre los efectos beneficiosos de los componentes de esta
planta en la salud, siempre que se incorpore esta infusión a la dieta
habitual.
En concreto, se destacan las siguientes aportaciones:
- Los polifenoles del té son antioxidantes que protegen al organismo frente al envejecimiento celular, contribuyendo a regular los niveles de colesterol y ayudando al cuerpo a absorber menos grasa.
- Su contenido en flúor previene la formación de caries.
- La teofilina ejerce un efecto diurético y también vasodilatador.
- La teína resulta un “estimulante suave” del sistema nervioso central que contribuye a despejar la mente.

Tipos de té y peculiaridades
A partir de las hojas frescas de la
‘Camelia Sinensis’ se elaboran distintas variedades de té. Se puede
hacer una clasificación del té en cinco colores genéricos en función de
su color, sabor y nivel de contenido de principios activos,
características que dependen exclusivamente de los métodos de
elaboración utilizados.
Té Negro
Para elaborar esta variedad las hojas
frescas de la Camelia Sinensis pasan por un proceso de oxidación
completo que transforma el color verde original de la hoja en un marrón
oscuro, haciendo que los aromas se tornen más complejos. Las infusiones
resultantes tienen un color ámbar, con cuerpo y sabor intensos. Se trata
de la variedad más estimulante, ya que la oxidación favorece la
liberación de la teína en la infusión.
Té Oolong
También conocido como té semi-fermentado
o “Té Azul”, en su elaboración se repiten los procesos de enrollado y
oxidación de las hojas hasta veinte veces. En esta variedad se combinan
las características del té verde y del té negro, destacando unas u otras
en función del grado de oxidación. La infusión resultante tiene un
sabor equilibrado, ligeramente tostado y los colores resultan ocres
anaranjados. Destaca por su función digestiva.
Té Rojo (Pu Erh)
Té chino post-fermentado a partir de
hojas de té verde, con un proceso especial de fermentación en bodegas no
revelado por sus productores. Utilizado ancestralmente por la medicina
china, destaca por su función como reductor de peso y del nivel de
colesterol en sangre. Su infusión es oscura con tonos rojizos y su
carácter, marcadamente terroso.
Té Verde
La oxidación de las hojas se impide
mediante un escaldado rápido para desactivar la enzima oxidasa. La
infusión resulta suave y delicada, ligeramente herbal y de tonos
amarillentos, verdosos o dorados. Resulta diurético y rico en
antioxidantes.
Té Blanco
Se elabora a partir de las tres hojas
terminales de la planta, con el brote sin abrir y con su capa de “pelusa
blanca”, lo que le da el nombre a esta variedad. Las hojas sin oxidar
se marchitan y secan artesanalmente, preservando todo el sabor y las
propiedades de la planta. Se trata de la categoría más selecta y
distinguida por su aporte máximo de antioxidantes.
Diversos estudios realizados en
laboratorios de diferentes países han encontrado en el té sustancias que
tradicionalmente han mostrado su eficacia en la prevención, control y
reducción de algunos tipos de cáncer o tumores cancerígenos.
Pese a la prudencia de los investigadores, las conclusiones de varios experimentos llevados a cabo, parecen redundar en la teoría de que los flavonoides, unos compuestos orgánicos presentes en el té con propiedades antioxidantes, en ciertos casos ejercen una acción inhibidora de esta enfermedad.
Pese a la prudencia de los investigadores, las conclusiones de varios experimentos llevados a cabo, parecen redundar en la teoría de que los flavonoides, unos compuestos orgánicos presentes en el té con propiedades antioxidantes, en ciertos casos ejercen una acción inhibidora de esta enfermedad.
La temperatura a la que se ingiere la
infusión también puede ser determinante en un sentido u otro. Las
propiedades antioxidantes de los flavonoides tienden a desaparecer
cuando el té se consume muy caliente. Investigaciones realizadas en
China en 1994 demostraron que en el cáncer de esófago, en cuya
prevención el té juega un papel importante, se daba esa relación. Así,
los efectos positivos del té disminuían a medida que aumentaba la
temperatura a la que se consumía.
Las cualidades antioxidantes de los
flavonoides también se dejan sentir en el órgano más importante de
nuestro cuerpo: el corazón.
Las investigaciones realizadas hasta el
momento han establecido un vínculo entre el consumo de 4 ó 5 tazas de té
al día y el descenso de colesterol en la sangre y la regulación de la
tensión arterial.

El té ha mostrado su eficacia en la
reducción de colesterol y triglicéridos (dos tipos de grasas presentes
en la sangre) tal y como lo demuestran algunos estudios llegados a cabo
en Gran Bretaña y Noruega:
- En la primera experiencia, cuyos resultados se publicaron en 1992, 4.317 hombres y 1.698 mujeres presentaron signos evidentes de que a medida que crecía la ingesta de té bajaban los niveles de colesterol en la sangre.
- En el mismo año 9.856 noruegos y 10.233 noruegas de entre 35 y 49 años fueron sometidos a idéntico estudio comprobándose también un apreciable descenso del colesterol. Asimismo, se ha procedido a analizar la influencia del té en la tensión arterial llegando a la conclusión de que un consumo de 4 ó 5 tazas diarias consigue reducir el valor máximo o sistólico de la misma.
Su bajo contenido en sodio y la
presencia de potasio, dos elementos que tradicionalmente se asocian con
el control de la tensión, explicarían el papel regulador de la infusión
(otros 2 estudios realizados entre amplios grupos de población parecen
avalar la tesis de que el consumo regular de té reduce el riesgo de
sufrir accidentes cardiovasculares).
La acción de los flavonoides, comprobada
en varios experimentos de laboratorio, sería la responsable de este
efecto beneficioso. Sin embargo y al igual que ocurría con los exámenes
efectuados para determinar la positiva incidencia del té en la
prevención del cáncer, existen dificultades para aislar el papel de la
bebida en el conjunto de la dieta seguida por las personas sometidas al
control. Sí se sabe, en cambio, que el cuerpo humano necesita los
flavonoides por sus propiedades antioxidantes y que el té es, en muchos
países, la principal fuente de suministro de este importante compuesto
orgánico.
Notas al pie
Oxidación:
reacción química producida por el contacto de una sustancia con el
oxígeno, dando lugar a transformaciones en los componentes iniciales de
la materia oxidada.
Fermentación: degradación de sustancias orgánicas por la acción de enzimas microbianas (bacterias).
Las
informaciones que acabamos de enunciar son GENÉRICAS y pueden presentar
cambios sustanciales según la fuente de la que procedan.
Como
expertos en té, nuestra filosofía es poner en manos de nuestros
vendedores profesionales todas las informaciones que tengan una fuente
segura sin por eso excluir las distintas opiniones referentes al té y
sus grandes propiedades beneficiosas.
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